- ¡¡Hola Dios!! Vaya mosqueo te debes haber cogido... Es que salir cinco nominados no es moco de pavo... Pero bueno, como siempre, nosotros te damos las gracias por estar un ratito más en la caja. Por mi parte, creo que ya me has ido perdonando, ¿verdad? He dejado de tener esos pensamientos impuros con Pozi... Ahora pienso en bodas, flores, cánticos, regalos, en vestirme con una sotana bien blanca ante un altar... Yo sé, Dios, que sólo se pueden casar los protestantes... ¡¡Pero eso no supondría que dejase de creer en ti!! ¡¡La religión tampoco puede ser tan extremista!! Mira los musulmanes... ¡¡Explotan literalmente por amor a su ídolo pagano postizo!! ¿Alá se llama, no?
Pues eso, yo quiero casarme, Dios. Y si es necesario, ¡me mudo de religión! Ahora el deseo carnal de un matrimonio espiritual es muy grande. Tal vez éste sea el camino que tú quieras que siga... ¡Amén!
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