- ¡Ays! ¡Qué pesadilla! En vez de vivir todos dentro de la caja felices, practicando el amor libre y paseándonos desnudos... Nos nominamos unos a otros. Esto ya empieza a aburrirme...
Me doy cuenta de que me quieren echar por considerarme una guarrona. Pues fíjate tú, en realidad, me estoy absteniendo todo lo que puedo... Porque una chica de ahora, no puede sobrevivir con un polvo semanal. ¡¡Eso es muy precario y retrógrada!! Es de la época de mi abuela. ¡¡Reivindico mis dos kikis diarios!! ¡¡Me niego a reprimirme y no mostrarme tal como soy!! ¡¡Quiero sexo y lo consigo!! ¿¿Qué hay de malo en ello?? ¿¿A quién le puede molestar?? ¿¿A quién le puedo hacer daño?? Mi intimidad es asunto mío y de todo el que la quiera compartir... Pero eso no da derecho a juzgarme por una mínima parte de lo que soy. ¡¡Soy mucho más que una ninfómana!! ¡¡Soy una mujer fuerte, con integridad, principios e ideales!! Si nos amásemos todos abiertamente no habría tanto cerrado de mente y sonreiríamos un poco más. ¡¡¡ARRIBA EL PODER TERAPÉUTICO DEL ORGASMO!!!
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